Esta estrategia de seguridad integral lanzada en julio que articula la coordinación de fuerzas municipales, estatales y federales bajo un mando único coordinador tiene el objetivo de enfrentar y reducir la criminalidad en una región que concentra más del 52% de la incidencia delictiva estatal. Ahora se unen Coacalco, Cuautitlán e Izcalli.
Operaba solo en Naucalpan, Tlalnepantla, Ecatepec, Nezahualcóyotl, Texcoco, Ixtapaluca, Chimalhuacán, Chicoloapan, Chalco, Valle de Chalco Solidaridad y Los Reyes La Paz. Dado que desde su implementación, se ha registrado una reducción significativa de índices delictivos en la región, los municipios aliados cada vez son más.
El Gobierno del Estado de México, encabezado por la gobernadora Delfina Gómez, en la edición del 8 de septiembre de la Mesa de Construcción de Paz estatal, ormalizó la integración de los municipios de Coacalco, Cuautitlán e Izcalli al Plan Oriente de Seguridad.
Este Mando Unificado Oriente busca atender las causas profundas del delito, fortalecer la coordinación entre los cuerpos de seguridad y promover la proximidad con la comunidad para construir paz y justicia. Esta estrategia es vista también como un modelo de seguridad que puede replicarse en otras regiones del país.
Con la incorporación de tres municipios más al Mando Unificado Oriente se busca mantener a la baja los delitos de alto impacto y con ello establecer la paz en una de las zonas históricamente olvidadas de la entidad.