En el Estado de México, la seguridad ciudadana es la prioridad y, para reforzar la lucha contra la delincuencia, el gobierno estatal ha implementado un programa innovador: el entrenamiento especializado de perros policías. Esto es lo que sabemos al respecto.
Estos caninos son entrenados en habilidades específicas que les permiten detectar drogas, armas, explosivos y localizar personas desaparecidas, convirtiéndose en aliados esenciales para las corporaciones de seguridad. Ahora, elementos policiales y binomios caninos fortalecerán las estrategias de seguridad gubernamentales.
El programa se centra no solo en las habilidades olfativas de los perritos, también incluye el adiestramiento en obediencia, destreza y socialización para garantizar un trabajo coordinado, seguro y ético entre los perros y sus entrenadores. Los instructores especializados se aseguran de que cada canino esté listo para enfrentar retos reales en entornos urbanos y rurales.
Los perros pueden identificar sustancias ilícitas y riesgos con gran rapidez, además de que su presencia disuade la comisión de actos delictivos en espacios públicos y eventos masivos. Los canes también permiten a las autoridades realizar inspecciones más efectivas y acortar tiempos de respuesta, sobre todo en operativos complejos como los de búsqueda de personas desaparecidas o atrapadas en situaciones de emergencia.
Al momento, la incorporación de estos perros entrenados ha generado una reducción significativa en delitos relacionados con narcóticos y armas. Su presencia tiene un impacto positivo en la percepción que los ciudadanos tienen de las fuerzas de seguridad, las y los mexiquenses suelen percibir a estas unidades como más accesibles y confiables.
La iniciativa, denominada Entrena Edomex, demuestra que la combinación de tecnología, talento humano y el instinto animal puede ser una poderosa herramienta para combatir el crimen. Sin duda, estos caninos policías seguirán siendo pieza clave en los planes de seguridad del Estado de México.