Naucalpan inició la semana con alerta de derrumbe para las familias de la calle tercera cerrada de San Lorenzo La Cañada. Esto es lo que sabemos sobre el riesgo de derrumbe en esta demarcación del Estado de México.
Este lunes se registró un derrumbe en un talud, que desprendió cerca de 14 toneladas de material rocoso, y al menos cuatro casas quedaron al filo de la pendiente.
Esta zona, como otras en Naucalpan, enfrenta un peligro latente, causado por las lluvias intensas y la falta de estabilización adecuada del terreno. Las autoridades han realizado algunos estudios de suelo para entender mejor las condiciones del terreno.
El compromiso es diseñar acciones concretas para estabilizar y proteger a la población, pues ahora hay incertidumbre y miedo entre los vecinos. También es crucial facilitar vías de evacuación seguras ante emergencias y promover un manejo responsable del uso de suelo para evitar más tragedias.
Los riesgos de deslave están directamente relacionados con diversas condiciones que agravan la vulnerabilidad de las comunidades, entre ellas, la existencia de asentamientos informales en laderas y cerros; las fuertes lluvias que saturan el terreno; y la falta de obras de estabilización, monitoreo adecuado y políticas efectivas de prevención y ordenamiento territorial.