En uno de los países más contaminados de Latinoamérica y del mundo, el Estado de México ha dado un paso significativo hacia la sostenibilidad ambiental con nuevos impuestos ecológicos. Y, aunque muchas empresas puede significar incrementos en el costo de operación, es también una oportunidad de cuidar al medio ambiente y aprovechar los subsidios del Gobierno del Estado de México (GEM).
Estos impuestos están diseñados para gravar actividades que impactan negativamente el ambiente que ya de por sí se encuentra en estado crítico con gran cantidad de emisiones de contaminantes atmosféricos para el aire, los cuerpos de agua y, en consecuencias, para todo ser vivo.
Además de buscar reducir las emisiones contaminantes, el Edomex prevé incentivar inversiones la implementación de tecnologías limpias en la entidad, para ello, hay una recompensa. Ofrece subsidios para quienes adopten prácticas sostenibles.
El GEM pone sobre la mesa un subsidio del 100% durante 12 meses para los negocios que inicien operaciones en 2025 con domicilio fiscal en el Estado de México, y cubran todos los impuestos ecológicos relacionados con su práctica.
Pero eso no es todo, hay otros incentivos y descuentos para las empresas que emprendan acciones a favor del medio ambiente, entre ellos, un descuento del 50% por disposición y almacenamiento correcto de residuos; además de 50% en sistemas de tratamiento o captación de agua de lluvia para empresas que los utilicen en procesos industriales.
Por otro lado, el Gobierno del Estado de México ofrece deducciones de hasta 40% de gastos operativos para empresas que implementen tecnologías para reducir residuos; y subsidios del 30% en el impuesto por emisión de gases, para empresas que sustituyan vehículos impulsados por combustibles fósiles por unidades híbridas o eléctricas. Esto solo por mencionar algunos de los beneficios para las organizaciones que apuesten por las tecnologías limpias.