El gremio de transportistas del Estado de México ha solicitado un aumento en la tarifa mínima del transporte público, proponiendo un incremento de 12 a 16 pesos, lo que representa un alza del 33%, ¿es rentable para la población?
Esta petición responde principalmente al encarecimiento de combustibles, la inflación en productos básicos y la competencia con el transporte irregular que afecta sus ingresos. Algunos conductores ya han comenzado a cobrar hasta 14 pesos en zonas como el Valle de Toluca sin autorización oficial, lo que ha generado molestias entre los usuarios.
La Secretaría de Movilidad del Estado de México (Semov) aún no ha autorizado oficialmente ningún aumento, por lo que llama a los concesionarios a respetar la tarifa vigente de 12 pesos y denunciar cualquier cobro ilegal. Se están llevando a cabo mesas de diálogo entre la SEMOV y la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat) para analizar la viabilidad del incremento y buscar acuerdos.
Los empresarios del transporte público en el Estado de México exigen que antes del 15 de octubre se defina el ajuste tarifario. Al respecto, el delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat) en la entidad, Odilón López Nava, advirtió que mantener la tarifa vigente “ya no es viable ni sostenible” y urgió al Instituto del Transporte a emitir una resolución la próxima semana.
Las autoridades mexiquenses señalan que, aunque reconocen las dificultades económicas para los transportistas, un aumento en la tarifa no resolverá todos los problemas del sistema de movilidad, por lo que también es necesaria una mejor regulación, infraestructura y programas para combatir el transporte irregular. Además, se espera que cualquier incremento se acompañe de mejoras en el servicio, equipamiento y atención al usuario para justificar el alza.