Se trata de una vía clave para la movilidad de miles de personas, pues conecta a la Ciudad de México con el Estado de México, sin embargo, resultó gravemente dañado por los sismos ocurridos en 2017. El daño estructural fue severo, pero ya inició el proceso de reconstrucción del Puente del Periférico Oriente y así quedará.
La obra presentó grietas, desplazamiento de vigas e inclinación de columnas, lo que obligó al cierre parcial, y total en algunos tramos, de estas vialidades, afectando la movilidad diaria de quienes viajan rumbos a centros de trabajo y escuelas.
Luego de ocho años de cierres, la infraestructura inició su proceso de demolición y reconstrucción, y se estima quede concluida en octubre de 2027 para una reducción de hasta 40 minutos en los tiempos de traslado entre la capital del país y el Estado de México.
La gobernadora Delfina Gómez indicó que la obra conlleva una inversión cercana a los 2 mil millones de pesos. Se prevé que la primera parte concluirá en mayo de 2026 y en 2027 la obra completa. Contempla no solo el reemplazo, sino también un diseño actualizado que incluye cimentación más profunda y resistencia sísmica mejorada, aprovechando los avances que los últimos años han traído consigo en este rubro.
De manera puntual, se rehabilitarán 1.2 kilómetros, se generarán más de mil 300 empleos y se beneficiará a, por lo menos, un millón de personas. Se ve como un acto de justicia territorial para mejorar la conectividad y movilidad especialmente de la zona oriente del Valle de México.
Gómez ha puesto énfasis en proyectos de movilidad y obras que mejoren la conectividad y reduzcan la saturación vehicular en la región. Entre sus principales preocupaciones está garantizar un transporte y vías seguras, eficientes y modernas para millones de personas que transitan diariamente el estado y las vialidades que lo conectan con otros.